top of page
Buscar

Insensibilidad y mal karma

  • Foto del escritor: Rodrigo Joaquín del Pino
    Rodrigo Joaquín del Pino
  • 17 feb
  • 2 Min. de lectura

Actualizado: 22 mar





Muchas personas quisieran vivir en una mansión frente al mar junto a su príncipe o princesa, pero hay que tener muy buen karma para que eso suceda. 


Generalmente, la gente come animales muertos, no mira lo que pasa en los mataderos, no se fija en cómo gana su dinero ni cómo se relaciona con los demás. 


La gente dice: “¡Que nadie se meta con mi forma de comer, de ganar dinero o mi manera de involucrarme en la actividad sexual!” Y así genera un karma que termina por malograr su destino… pero nadie se lo hace notar. 


Las personas no saben por qué les va mal en la vida, por qué se sienten confundidas, sin amor. Lo que sucede es que nadie les enseña la verdad, todo el mundo las adula, entonces piensan que son reyes que vinieron a ser servidos. Esto las lleva a enredarse en muchas actividades kármicas, es decir, actividades que traen reacción: aflicción mental, angustia, soledad, congoja, enfermedad.


Si quieres acceder a un buen karma, como el de una reina o un rey, debes realizar actividades piadosas, compasivas con otros seres vivos.


“Si en el planeta donde vivimos hay baja de animales, entonces tendrá que haber, tarde o temprano, baja de hombres”, escuchaba decir a mi maestro. Crecí en una cultura donde se conocen las leyes universales.


Un hombre amando de verdad a los animales no mascotas nos resulta sorprendente y transformador. Esta es otra prueba de que fuimos programados para la desconexión de un plano más profundo. 


No tienes derecho a causar el menor dolor o incomodidad a ningún ser viviente y, si lo haces, recibirás una reacción. El universo es altamente sensible: genera una reacción en la matrix y en el propio cerebro. Para evitarla, puedes cambiar de actitud y modo de accionar.


No se trata de escuchar y entender mentalmente, sino de implicarte en modificar tu conducta y vivir la fuerza de tu corazón. Esto sucede cuando te transformas, fruto de lo que aprendes.


Actuar con sensibilidad hacia los seres inocentes nos libera y nos regala una nueva vida. ¡Vamos! Empieza por tu comida.🌱



Rodrigo Joaquín del Pino

PhD Indovedic Theology

Comments


bottom of page